Sean
divorciados o viudos, todos se asustan con la idea de presentar a la nueva
pareja. Pero atención: el estado emocional del niño es lo más importante.
Lidiar con los sentimientos de los más pequeños de
la casa no es cosa fácil. Y que acepten una nueva relación sentimental de uno
de los padres tampoco. Por ello, según encuestas y análisis realizados con psicólogos,
psiquiatras y psicoterapeutas es aconsejable esperar por lo menos seis meses
antes de dar la noticia al (los) hijo(s)
en caso de divorcio, y por lo menos un año cuando se trata de viudez.
Este tiempo servirá para que el hijo asimile la separación,
viva su duelo y exprese su tristeza de no tener más al padre o madre. Si ve
interrumpido este proceso por el anuncio de la nueva pareja, se sentirá frustrado
y no aceptará esta noticia de buena gana.
La personalidad del menor pesa cuando se trata de
juzgar a la nueva pareja, pero también su edad. Los niños pequeños se confunden
porque, cuando el caso es de divorcio, cuando aún esperan una reconciliación,
de pronto viene una tercera persona y lo altera todo. En cambio en los
adolescentes se presenta la rebeldía, ya
que si bien son conscientes del fin de la relación de sus padres, ven como una traición
que uno de ellos se enamore de otra persona.
Por ello no trates de imponer a la nueva pareja y
mucho menos de tomar una decisión tan importante como mudarse juntos muy
pronto. Esto debe ser conversado con el hijo como un plan a futuro.
Ahora, relájate, disfruta de una aromática y
deliciosa taza de café, y que tengas un buen fin de semana…
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